Reflexión de mi condición y causa
El astrofísico que no puede ver las
estrellas.
Dedicado al otro Cecilio
La vida habitual de los seres
racionales, que vivimos con una inhabilidad de cualquier pauta, te sitúa
siempre en una intersección. Por decirlo, si herir sensibilidades y sin hacer
un planteamiento trágico y mucho menos fatalista. Somos participantes de la
vida, pero sin perder nuestra condición de personas, que nos distingue y nos
debe de ayudar para abrimos paso, con algo de dificultad por el orbe, con una condición
especial, pero sin dimitir del conjunto de las otras características que nos
definen como mujeres y hombres que somos. Se por propia experiencia que esa cualidad
especial de concernirnos con nuestro hábitat, nos da un valor añadido, ya que
eso nos hace tener una perspectiva diferente y motiva ideas o emociones de gran
valor para nosotros mismos y, para los que nos rodean.
Suele ocurrir, por ejemplo, una
persona que este inmovilizada que sea proyectista o jurista, una impedida con
deficiencia de sordomuda que sea profesora de escuela o una persona con
discapacidad, intelectual que trabaje en una residencia de ancianos contribuyen
y aportan experiencias y puntos de vista inestimabilísimos para las personas
que los rodean y, por extensión, para el resto de la sociedad. En otros momentos,
esa situación se da en contextos tan aparentemente contradictorios como el mío,
que soy casi ciego, padezco una discapacidad visual muy severa. Soy, digámoslo
así, un “astrofísicos que no puede ver las estrellas” y, aún así, puedo
realizar mi actividad, de manera satisfactoria y aportar un punto de vista,
equivocado o no, eso lo diréis vosotros a los grupos de personas que me leen o
me escuchan y también con los que a diario me relaciono de viva voz.
Despreciar un punto de vista, por muy
en las antípoda que nos encontramos de él, será no tener una visión planetaria
del cosmos. Vamos, ponerle un coto al infinito. Todos y todo aportan un algo,
que nos permitirá contemplar ese algo de manera distintas y nos podrá hacer
reflexionar e incluso rectificar.
Cecilio Urgoiti
No hay comentarios:
Publicar un comentario